NO TE METAS EN MI VIDA

¡ NO TE METAS EN MI VIDA ¡

¿Que no me meta en tu vida?
Hace más de 30 años, producto del amor que tu madre y yo nos teníamos, tu llegaste a nuestras vidas. Durante 9 meses tu mamá se sintió muy mal, no podía comer y casi todo lo que comía lo devolvía.
Tuvo que guardar reposo
y yo tuve que repartirme entre mis tareas del trabajo y los deberes de la casa.
Nos tuvimos que olvidar de paseos, reuniones, salidas y amigos … solo por ti.
Aumentaron los gastos en la casa en forma notable; casi todo nuestro presupuesto lo gastábamos en ti, médicos, medicinas, maternidad … tu madre no podía ver algo para bebé que no quisiera comprar. Compraba todo.
“ Que no me meta? … “
… Llegó el día en que naciste. Eras un relojito, cada tres horas despertabas a pedir comida y llorabas, llorabas, llorabas … no nos dejabas dormir …
“ Me dices que no me meta? …”
Empezaste a caminar y no se cuándo he tenido que
Estar más detrás de ti, si cuando empezaste o cuando creíste que ya sabías.
“ Me dices que no me meta? …”
… Todavía recuerdo el primer día de clases: Te paraste en la puerta de la escuela y no querías soltarnos. Llorabas y llorabas y llorabas y nos pedías que no te dejáramos … luego, al hacer nuevos amiguitos te olvidaste de nosotros y algunas veces ni te despedías.
“Me dices que no me meta? …
Del colegio recibimos muchas notas: “que no haces caso”, “que lastimaste a un niño”, “que rompiste el cuaderno de un compañerito”, “que no haces las tareas”, … fuiste creciendo y contigo crecieron también tus aventuras.
“Me dices que no me meta …
Un día, la vecina se acercó para decirme que le habías roto un vidrio de la ventana.
… Cuando tenías 13 años querías salir con todos tus amigos y no llegabas temprano a la casa, si hablábamos de ellos te enfurecías y cuando te pusimos reglas pasó lo mismo.
Cuando te llevábamos al colegio nos decías que te dejáramos una cuadra antes, y si te íbamos a recoger tenía que ser una calle después. NOS HACÍAS VER COMO LOS PEORES PADRES DEL MUNDO.
Tu madre tenía que limpiar a cada rato tu desordenado cuarto que no permanecía ordenado ni una hora.
“Me dices que no me meta? …”
Cada vez sabemos menos de ti. Lo poco que sabemos lo oímos de los demás. Dices que te regañamos, que hacemos comentarios negativos de ti, que todo lo haces mal.
Fíjate, con tantos supuestos defectos nuestros, te hemos podido dar lo que ahora tienes. Que torpes y tontos somos , ¿no te parece?
Tu madre pasa las noches en vela cuando no llegas temprano a la casa, y a mi me buscas solamente cuando necesitas dinero.
Hoy estoy seguro que ante estas palabras
“No te metas en mi vida”,
Podemos responder, tu mamá y yo:
Yo no me meto en tu vida, tu te has metido en la nuestra y te aseguro que desde ese primer día hasta hoy somos la pareja más feliz del mundo.
Gracias a los padres por meterse en la vida de sus hijos, pues gracias a eso, Ellos son ahora hombres y mujeres de bien, maduros y bien formados.
Hijos, valoren a sus padres. Es cierto que ellos no son perfectos, ustedes mucho menos.
De todas formas esperen a que lleguen los críticos más implacables a su vida :
SUS PROPIOS HIJOS. Autor Desconocido. E. L.